viernes, 24 de septiembre de 2010

hay fue el ciclo. vino. pasó. unas cuantas semanas, la bici, una casa, otra, la tardecita, la mañana, el domingón. y el cielo tan abierto, ya mañana, quién sabrá. el sabor de otravez va invadiendo el tiempo, las ganas, el acuerdo, lo dicho. lo hecho.
y retornamos, qué si no después de un ciclo, al vos vos, al yo yoísmo, al reducir toda potencia a la miedosa síntesis: hasta acá. y tu palabrerío, ordenando los bordes de lo decible, lo repulsable, lo querible, lo sentible. y yo tan canchera aquellos días, jugando a lo nuevo. cabeza - pared sin escalas.
y afuera quema el sol, bicho. afuera el cielo sigue pa todos los costados porque no puede ser de otra manera. y tampoco.
sin embargo, pensador de pensamientos, adentro arremeten los -ya conocidos- ogrontes.

2 comentarios:

  1. Qué lindo esto! Irualana me gusta mucho este espacio, siga escribiendo que yo pasaré a leerla y a dejar mis saludos.
    Abrazo primaveral sin pecas.

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  2. adentro, afuera... vaya uno a encontrar el lìmite

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